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sábado, 29 de septiembre de 2018

Persiguiendo a la Luna y al Sol

El fin de semana pasado intentaba capturar de nuevo a la Luna pasando tras el giraldillo, para ello me desplazaba cerca del puente del Cachorro. Allí estábamos José Lazo y yo tras haber estado disfrutando de un espectáculo luminoso en la capilla del Sagrario de la Catedral de Sevilla donde los rayos del sol por las vidrieras cae de forma casi horizontal sobre las redes del techo. Este fenómeno es más pronunciado las tardes cercanas al equinocio (gracias a José pude fotografiar esta imagen curiosa).



El caso es que al llegar al sitio indicado por Photopills nos encontramos al giraldillo muy lejos y una vegetación de rivera espesa que no nos dejaba fotografiar nada de nada.

Al ver una terraza en lo alto de un hotel justo en el mismo sitio decidimos preguntar si se podía subir aún sin estar hospedados en el hotel y como nos dijeron que era posible, allí subimos con todos los bártulos.

El sitio quedaba alejado para una buena foto y además al no ser de noche cerrada se notaba bastante el viñeteo del maksutov en la imagen.


El siguiente día que lo intenté fue el Martes y quedé con Luis Lucero en el puente de Triana, pero justamente la copa del árbol situado donde acaba el puente nos tapaba el paso de la Luna por detras del Giraldillo. Nuestro gozo en un pozo.

El miércoles se presentaron nubes y el jueves por fín desde la calle Betis pude conseguir el alineamiento perfecto. Aunque había enfocado a la luna con los pequeños desplazamientos del trípode necesarios para colocarme en el punto exacto se acabó desenfocando la Luna en las tomas.



El sábado cambié de modelo y subí a la azotea porque sabía que el sol se pondría por detrás dela Torre Sevilla y así pude capturar con el mak127 y el filtro solar la siguiente imagen.



Mi intención era sacar el sol tras las cristaleras de la parte superior de la torre y ésto ocurre  desde la azotea de mi bloque solo un día al año (calculado con Photoills).

A la tarde siguiente lo volví a intentar, esta vez sin filtro pero ya el sol no pasaba justamente por el centro superior de la torre.



Tendré que esperar otro año para intentar repetir esta imagen.


domingo, 16 de septiembre de 2018

Comienza la temporada de encuentros

En el otoño comenzarán los encuentros fotografiables entre la Luna y el Giraldillo. Dependemos de la meteorología para que nos permita capturar a la Luna tras el giraldillo en su fase de Luna llena, pero en cualquier caso no hace falta esperar a Luna llena para capturar un encuentro.


Esta foto es del día 29 de Agosto, lamentablemente soplaba aire fuerte en Sevilla y no permitieron obtener tomas nítidas del fenómeno.


Menos focal más estrellas

Eso es lo que pensé tras el atracón de via láctea de este verano y como los 16mm del zenitar no me cogen la vía láctea al completo opté por adquirir un samyang 8mm para sacar fotos de gran campo donde la vía láctea sea la protagonista de las tomas (amén de arquitectura de edificios que también serán modelos a fotografiar).
Para probarlo aproveché la salida al Murtal, que si bien no tiene un cielo espectacular no deja de ser aceptable, sabiendo que Sevilla queda a unos 50 kilómetros de distancia.


Habrá que buscar cielos mejores (si lo meteorológico lo permite) antes de que se "ponga" la vía láctea entrado el otoño.

Recuerdos del verano

El verano que ya acaba lo recordaré por las subidas a Calar Alto, allí me he llevado muchas horas disfrutando del cielo de ese lugar, contemplando bólidos, el eclipse lunar, las perseidas, y otros fenómenos astónomicos. Valga esta colección de fotos como resumen.


La zona de Deneb con el objetivo soligor 60-300 a 60mm.


Y la zona de Sagitta con el mismo objetivo y focal.


Ambas fotos son resultado de apilar decenas de imágenes capturadas con a cámara sobre  la montura star adventurer.


Fui capaz de capturar la supernova 2017eaw allá por la magnitud 18 y pico con un mak127 sobre la monturita star adventurer apilando tomas capturadas con la atik460.


En verano no hay quien se resista a sacar una foto de la vía láctea detras de las cúpulas del complejo.


Tuve la suerte de capturar un bólido que ilúminó todo el complejo con su resplandor.


Después llegó el eclipse de luna.


Lamentáblemente lo que no se detiene es la contaminación uminosa no solo ya de Almería sino de otras localidades costeras.

Las perseidas comenzaban con unas tormentas en el valle del Almanzora que afortunadamente fueron retirándose durante la noche.

Y vimos un buen número de persidas a lo largo de toda la noche.


Y tristemente me tuve que despedir de este lugar único en Andalucía para disfrutar del universo. Espero volver el año que viene.