La noche del 6 al 7 de agosto aguanté hasta el amanecer en Calar Alto y me recompensó con la visión de la luz zodiacal. La estuve observando durante un buen rato y al final pude sacar unas cuantas fotos para dejar constancia.
El brillo del horizonte es contaminación lumínica que sufre el observatorio hacia el nordeste, pero la "mancha triangular" que sube sobre el horizonte ya no corresponde con la contaminación lumínica.
En septiembre empieza a verse por el este, justo antes del amanecer.